Consejos sobre frascos

Preparación de frascos, tarros o tazón.

Ten a la mano todo lo que esperas que coma tu bebé y calienta esta cantidad en baño María o en un microondas. Si usas el baño María, asegúrate de que la temperatura no supere los 70°C, ya que a esta temperatura la etiqueta podría desprenderse y hacer que se caiga de tu mano.

*El tiempo exacto depende del tipo de horno.
  • Después de calentar, revuelve bien el contenido del frasco, tarro o el tazón con una cuchara de plástico y verifica cuidadosamente la temperatura.
  • No reutilices las sobras que ya hayas calentado.
  • Las sobras sin calentar se pueden mantener cerradas en el refrigerador, pero deben usarse dentro de los próximos 1 a 2 días (vea la etiqueta).
  • Ten en cuenta: con temperaturas superiores a 70°C, la etiqueta podría desprenderse y hacer que se le caiga el frasco.

Atención en la seguridad del frasco

Cada frasco y tarro se encuentra perfectamente sellado antes de salir de nuestro sitio de producción. Esto no sólo asegura que se entreguen productos correctamente cerrados, sino también alimentos de calidad para tu bebé. Verifica que el empaque no este dañado en la tienda o inmediatamente antes de abrirlo por primera vez. 

Con respecto a los frascos, intenta la “prueba de la tapa”: el centro de la tapa debe ser cóncavo (ligeramente curvado hacia abajo) y no debe ceder bajo presión. Cualquier frasco con una tapa curvada hacia arriba no debe usarse por razones de seguridad.

Además, debes escuchar un sonido de “clic” cuando abra la primera vez.

Con respecto a los tarros y tazones, intente la “prueba de presión”: sostén el tarro con la película boca abajo, presiona ligeramente un lado del tarro; si el producto tiene fugas, no uses el contenido.