Energía para el cuerpo gracias a la Niacina

¿Por qué es tan importante la niacina?

La niacina pertenece al grupo de las vitaminas B. El cuerpo necesita niacina para el metabolismo del cerebro - regula el azúcar en la sangre - así como para la respiración celular, los músculos y el tejido conectivo. Muchas enzimas involucradas en la conversión de energía requieren niacina. Pero la niacina puede hacer aún más: tiene un efecto positivo en el estado de ánimo, el sueño y la actividad cardíaca. 

Por último, pero no menos importante, la niacina ayuda a eliminar las toxinas y sustancias nocivas del cuerpo. 

Durante el embarazo y la lactancia, el cuerpo necesita más niacina de lo normal, y la necesidad es de entre 15 y 17 mg por día.

Buenas fuentes de niacina

El pescado y la carne son particularmente productivos, pero los huevos, los productos integrales, las legumbres, las verduras y las frutas contribuyen al suministro de niacina. Sin embargo, la niacina de las plantas no es utilizada por el cuerpo tan eficientemente como la de los productos animales. Es bueno notar que la niacina es relativamente estable al calor, la luz y el aire, y sólo un veinte por ciento se pierde durante la cocción. 

Señales de deficiencia

La enfermedad deficitaria más conocida es la pelagra, que significa "piel áspera". La pelagra se encontró ya en el siglo XVIII en zonas donde se consumía maíz y mijo, ambos alimentos naturalmente bajos en niacina. Incluso hoy en día, estas enfermedades de la piel se pueden observar en países emergentes. 

Una deficiencia puede conducir a trastornos del sueño y problemas digestivos. Una primera señal puede ser la pérdida de apetito, combinada con una boca seca y pérdida de peso. Puede causar mareos, dolores de cabeza y confusión.