"¡Whoo! Si pudieras verme, estarías orgullosa de mí.
Ya sé muchos trucos. Pateo con mis pequeñas piernas (por supuesto que aún no lo sientes), frunzo el ceño y empiezo a mover los labios. Después de todo, mi reflejo de succión tiene que estar perfectamente desarrollado cuando salga.
¿Y qué hay de tu condición física? Qué bueno si todavía haces ejercicio. Pero no exageres! No olvides que somos dos. Si te quedas sin aliento o con palpitaciones, entonces me siento de la misma manera. Si no estás segura de qué y cuánto puedes hacer, pregúntele al doctor. Pero a pesar de todo, en cuanto mejor prepares tu cuerpo, más fácil me podrás llevar contigo estos meses.”