Tómense mucho tiempo para las comidas compartidas, siéntense en la mesa con su hijo sin encender la televisión u otras distracciones. Su hijo debe tener su propio lugar donde pueda concentrarse en comer.
Proporcionen comidas en esta fase, siguiendo horarios bastante regulares.
Creen un ambiente relajado donde todos tengan tiempo para terminar la comida y también puedan dejar algo en el plato si no tienen mucha hambre. Sin embargo, no prolonguen las comidas. Después de 30 minutos, la hora de la comida debe haber terminado. ¡Y, es hora de volver a jugar!
El apetito de los niños es diferente de un día a otro, así que no los obliguen a comer.
Si es posible, eviten snacks entre comidas, ya que reducen el apetito por una comida adecuada.
Cuando estén de viaje, tu hijo debe mantenerse ocupado, pero no necesariamente con algo para comer. En lugar de eso, denle un juguete en lugar de algo para beber o comer.
Establezcan las reglas en la mesa desde el principio.
Deja que tu hijo te vea cocinar y conforme crezca, déjalo ayudarte. De esta manera, los niños pueden aprender que comer es divertido y algo para disfrutar.
Fomenten el desarrollo de su hijo. Ya no le den un biberón. Ahora su hijo debe aprender a tomar todas las bebidas de una taza.
La lactancia materna es el mejor alimento para tu bebé, le proporciona todos los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo. Adicionalmente, proporciona una buena protección contra infecciones y alergias, promueve la relación madre-hijo y es la forma más económica de alimentar a tu bebé. HiPP está convencido de los beneficios de la lactancia materna tanto para la madre, como para el bebé, apoya plenamente la lactancia materna de acuerdo con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
En la sección leche materna y lactancia encuentras información y consejos sobre los beneficios de la lactancia materna, que de manera temprana y frecuente favorece el flujo de leche adecuado por los conductos mamarios.
La decisión de no amamantar es difícil de revertir. Te recomendamos hablarlo directamente con tu pediatra o una consultora de lactancia. Cuando utilices un alimento para bebés, es necesario prestar atención a las instrucciones precisas de preparación, ya que si lo realizas inadecuadamente puede provocar problemas de salud en el bebé.